Todos los que nos leéis habitualmente recordaréis qué juego es el Ghosts’n Goblins. También es bastante posible que recordéis el Demon’s Crest de SNES, el cual estaba protagonizado por Firebrand, la gárgola que empezó siendo un enemigo en Ghosts’n Goblins, y que terminó protagonizó su propia serie de spin-off de Ghosts’n Goblins.
Os he nombrado el Demon’s Crest porque es el más famoso de todos, pero en realidad es el tercer capítulo de la saga de Firebrand. La saga comenzó a mediados del año 90, siendo publicado el primer juego en Game Boy bajo el nombre de Gargoyle’s Quest, literalmente, la aventura de la gárgola.
Al arrancar el juego, nos encontramos con una mezcla de géneros simplemente esperpéntica. No por nada malo, si no por lo sorprendente, la verdad es que la mezcla de géneros le sienta muy bien al juego.
Al comenzar, nos encontramos con el típico plataformas en el que debemos derrotar enemigos, dar saltitos entre plataformas y evitar obstáculos. Hasta aquí, un juego más. Pero lo verdaderamente sorprendente es que, al superar esta primera pantalla, la de plataformas, nos encontraremos con una vista aérea típico de los juegos de rol, al más puro estilo de Final Fantasy y similares. Sinceramente, la primera vez que jugué y sucedió esto, me quedé bastante descolocado, pero seguí adelante y os puedo asegurar que ha sido uno de los mejores juegos que he tenido oportunidad de jugar, y más, contando las limitaciones técnicas de Game Boy.
Principalmente, nos encontraremos con un entorno de juego 100% basado en los juegos de rol, pero la cuestión es, ¿es un RPG japonés o Action RPG? Pues ni lo uno, ni lo otro. Claramente, bebe de los RPG japoneses por la distribución del mapa, totalmente cuadriculado y con vista aérea, en el que visitaremos pueblos, encontraremos tesoros y objetos, y seremos abordados por distintos tipos de enemigos. Y he aquí el por qué no podemos definirlo como ninguno de los dos tipos principales de RPG. Desde luego, los combates que tendremos que librar contra los enemigos, no serán por turnos, por lo que se puede descartar que sea un RPG japonés. Pero tampoco podemos definir que los combates sean en tiempo real como suele ser en los Action RPG, ya que, los combates serán pantallas de plataformas. Sí, así es. Normalmente son pequeñas pantallas en las que deberemos derrotar a dos o tres enemigos.
Durante nuestras idas y venidas por la Ghoul Realm (literalmente Dimensión Demoníaca, en la que se desarrolla el juego) deberemos ir realizando misiones secundarios y recados varios hasta acometer el destino de nuestra misión. Por cada misión que realicemos, o según vayamos avanzando, obtendremos distintos objetos que ayudarán a potenciar nuestras habilidades o a hacerlas más variadas. La habilidad más básica y que mejoraremos con más frecuencia es el planeo, el cual podremos ir aumentando hasta el máximo posible. Además de, como es lógico, mejorar el poder de nuestro ataque, algo fundamental para poder derrotar a los enemigos que nos encontremos según vayamos avanzando. Y como no, aumentar nuestra vida, lo cual, siempre se agradece.
Los enemigos, desgraciadamente, no son muy variados. El enemigo más común que nos encontraremos son una especie de cofrades de Semana Santa, que quiero supones que en realidad, serán fantasmas o algo así. Aunque también nos encontraremos más tipos de enemigos como peces-esqueleto, moscas y otros seres voladores. En los pueblos y emplazamientos que visitemos, nos encontraremos con que los aldeanos son absolutamente iguales, y personalmente, parece que tengan apariencia de zombie. Con excepción de algún otro aldeano que tiene más bien pinta de koala…
Donde sí que nos encontrarmos variedad de enemigos es en los mid y final bosses, afortunadamente. Los cuales, pondrán nuestra paciencia y habilidad a prueba con sus distintos patrones y modus operandi.
Y el argumento, aunque no es de los más elaborado del sector, consigue mantener un hilo conductor durante el juego. Para empezar nuestra aventura se narra la historia de como los seres y demonios de la Ghoul Realm han abierto un portal dimensional para acceder a nuestra realidad y apoderarse de ella. El único que puede derrotar a los demonios y cerrar el portal, es Firebrand la gárgola. Y ese es el papel que debemos representar.
Y para finalizar, hay que tener en cuenta la buena noticia de que el juego está disponible en la Consola Virtual 3DS, pero también es mala, ya que sólo está disponible en Japón y USA. Así que ya sabéis, corred a desempolvad vuestra Game Boy y darle al START.
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