Battlefield 1 – Análisis PlayStation 4

Battlefield 1 coloca su bandera y presenta su candidatura a juego del año. DICE encumbra su obra gracias a una campaña genial, un multijugador pulido, unos gráficos majestuosos y una banda sonora épica.

Y por fin llegó Battlefield 1. La nueva entrega de la saga viene para ponerle las cosas difíciles a un Call of Duty: Infinity Warfare que tiene que tirar del pasado (remasterizado) para acallar las críticas  a su continuismo. DICE se supera en esta nueva entrega, mejorando en aquellos aspectos en los que cojeaba, y puliendo un multijugador brillante. Vamos al lío.

Poca ha sido la importancia que se la ha dado a la primera Guerra Mundial en los videjuegos. Si echamos la vista atrás, salvo el homenaje que supuso el genial Valiant Hearts, hace tiempo que no vemos el conflicto en nuestras pantallas. Es por ello que DICE ha hecho muy bien alejándose del conflicto futurista que planteaba su rival, y localizando su nueva entrega bélica en este suceso. Para la ocasión, encontramos un modo campaña sobresaliente y un multijugador que es un compendio de mejoras de lo conocido y añadidos con gran acierto.

El curioso modo campaña se divide en cinco historias alrededor del globo terráqueo, poniendo de relieve la grandeza de la contienda. Empezamos como Edward, un ex chófer metido a conductor de tanques, para saltar a manejar un aeroplano o encarnar al mismísimo Lawrence de Arabia.

La campaña, además de contar con unas cinemáticas espectaculares, sirven a modo de tutorial acelerado de mecánicas, armas y vehículos. A buen ritmo, es posible superar este reto en unas siete horas, pero si queremos tirar de sigilo, podemos irnos a las diez perfectamente. Y os recomiendo hacer esto último, ya que es una gozada.

Pero pasemos al plato fuerte: el modo multijugador. Como viene siendo habitual en Battlefield, ir a lo Rambo no trae nada bueno. Hay que ser parte del grupo, y en batallas de hasta 64 jugadores, nuestros actos cobran mayor importancia.

A los ya clásicos modos de TCT por Equipo, Asalto y Conquista (con su variante a corta distancia llamada Dominación), debutan el modo Operaciones y Palomas de Guerra. El primero nos pone en un bando y nos enfrentamos al rival en conflictos reales de la Gran Guerra.  La novedad es que el grupo derrotado recibe una serie de ventajas para afrontar la siguiente contienda. Palomas en Guerra es el modo más divertido, donde un equipo porta una jaula con una paloma y debe protegerla hasta poder enviar unas coordenadas y así bombardear al bando rival.

Lo bueno llega cuando la paloma es lanzada y el equipo contrario empieza a jugar al «tiro a la paloma». A pesar de desarrollarse en un mapa pequeño, este modo es un soplo de aire fresco al mundo multijugador de Battlefield.

Como es habitual, a medida que vamos jugando al modo multijugador, ganamos experiencia traducida en desbloqueos de ciertos elementos. Además, las cajas añaden cierto componente de suspense. Los mapas son muy variados y con miles de posibilidades para flanquear y atacar al enemigo por la espalda. Tenemos desde amplios desiertos hasta cargados bosques, e incluso zonas urbanas.

La capacidad ofensiva ha sido regulada para que, independientemente de la clase que elijamos (Explorador, Apoyo, Asalto o Médico), tengamos ciertas opciones de salir con vida del atolladero. Y todo esto podemos vivirlo bajo una tremenda estabilidad, que hacen del modo multijugador una gozada. Debo decir que, pese al famoso bug existente en PS4, no he notado ese bajón de FPS puntual que acontece al jugar online.

Gráficamente, DICE ha hecho un trabajo sobresaliente gracias al motor Frostbite. La armas, las animaciones, los combates… todo es un conjunto armonioso y realista. Se nos olvidará que estamos en un videojuego cuando veamos edificios derrumbarse, explosiones a escasos metros o a avionetas caer en llamas.

El apartado sonoro es una delicia que pide a gritos ser escuchada en cascos. Este análisis se ha realizado con el headset oficial de Sony y la experiencia tanto online como en campaña es apabullante. Durante la campaña, la banda sonora nos llevará en volandas tanto en enfrentamientos directos como en zonas donde el sigilo es la mejor opción.

En el apartado multijugador, el sonido es crucial para conocer por donde viene el peligro. Y para redondear, algo que no es nuevo en la saga: el doblaje al español ha sido realizado por voces de grandes dobladores nacionales, logrando un resultado formidable.

Battlefield 1 es la superación de DICE. Es un canto a la primera Gran Guerra donde el coro no desafina en ningún momento. Un modo campaña diferente, variado y espectacular. Un multijugador pulido y con interesantes añadidos que darán horas de juego. Gráficamente sublime y con una banda sonora digna de salas de cine. Battlefield 1 planta batalla por juego del año, y no será fácil batirle.