Hoy vamos a vislumbrar con el análisis de Sniper Elite V2 Remastered si nuestro Springfield M1903 necesitaba de verdad una actualización.
En una época donde la acción directa apoyada en las coberturas era lo “mainstream” se nos hizo curioso que naciese una propuesta como la presente. Dejamos a un lado los intercambios de kilos de balas para dar lugar a enfrentamientos más pausados, meditados y espectaculares en su justa medida. Mezclar sigilo con evasiones en ciudades destruidas por la furia del ejército nazi era atractivo y puede que siga siéndolo en la actualidad. Comprobémoslo con este análisis de Sniper Elite V2 Remastered.
Letal pero con altibajos
Tras películas como Salvar al Soldado Ryan o Enemigo a las puertas, nuestras ansias por revivir la experiencia de un francotirador en la Segunda Guerra Mundial en nuestras manos se dispararon. Rebellion tomó cuenta de ello allá por 2005, brindándonos el primer Sniper Elite. El juego era fastidioso y nos exigía mucha práctica para poder disfrutarlo de verdad, algo que considero que se trasladó en las entregas posteriores, aunque suavizándose con el pulido de diversos elementos y mecánicas.
No obstante, esta segunda entrega ya pecó en su día de ser muy áspera en ciertos temas. Por ejemplo, la IA enemiga es impredecible en el malo de los sentidos. Ver correr a los mendrugos contra nosotros a pecho descubierto era una práctica totalmente lógica en los años 30 para Rebellion así como que tengan visión de rayos X en muchos casos, pasando de largo de nuestros fantasmas, una mecánica que servía para indicarnos la última posición que conocía el enemigo de nosotros. Sea como sea, no estamos ante un problema que embadurne gravemente al programa, ese mérito se lo llevan los controles tan toscos que nos deja en nuestras manos.
Una distribución de botones correcta, pero cuya respuesta del mando debería ser más precisa -hablamos de una aventura donde el pulso y disparar en el segundo correcto es imperativo- en los tiempos que corren. Era perdonable hace unos añitos, pero tratándose de una remasterización deberían haber tratado de agilizar la respuesta de los inputs así como la capacidad de respuesta del protagonista con el entorno, que a veces parece que se enamoró de una cobertura con la cual no para de bailar la Macarena.
La impaciencia se castiga con sangre
El núcleo del programa fue –y sigue siendo– la elusión de los enfrentamientos directos y apostar por la infiltración. A no ser que juguemos en dificultades bajas, pegarse a tiros contra los nazis tendrá como resultado la bonita pantalla de Game Over. Morimos de pocos disparos, nuestras armas son una bazofia y los enemigos vienen en hordas. Esto no es para nada negativo, simplemente el juego nos grita que no juguemos a Call of Duty y pongamos a trabajar la materia gris.
Lanzar piedras, poner trampas, herir a enemigos para que griten… Tenemos recursos de sobra para movernos sin ser vistos o hacer masacres a distancia con nuestro rifle, ya que de eso versa la propuesta al fin de cuentas. Disparar con él es todo un placer, sobre todo cuando acertamos en el enemigo de turno, generándose un proceso de cámara lenta que sigue el trayecto de la bala hasta que impacta, con una bonita escena de rayos X, en un órgano o hueso del rival.
Según aumentemos la dificultad los disparos serán cada vez más exigentes. Cosas como la gravedad, el viento o la distancia entrarán en juego para que calculemos las trayectorias, haciendo inútil disparar justo donde converjan las líneas de nuestra mirilla.
Escondiéndose en ciudades de cartón-piedra
Las mejoras que trae esta versión Remastered se centran en lo visual y en aportar todos los contenidos descargables del original, es decir, un par de misiones más de la campaña, la campaña especial de darle matarile a Hitler y un arsenal ampliado.
Graficamente apenas notamos cambio con el juego base. Se ha dado más profundidad de campo, aumentado la resolución hasta los 4K, soporte widescreen a los ajustes de monitores modernos y lo más importante, poder jugar hasta 120 cuadros por segundo. No soy quien para negaros que os toméis esto a pitorreo, pero cuanto más framerrate podamos sacar por la pantalla, más satisfactorios son los disparos con el rifle de francotirador al disfrutar de la fluidez del trazado de la bala.
Aún así, el resultado final se nota pobre. Es un juego que pese a tener solo 6 años en el mercado, ya se le notan las costuras en texturas y modelos poco trabajados, sin contar el diseño muy acartonado de las ciudades derruidas. Los efectos del polvo, sangre y explosiones se mantienen mejor, y que decir de las escenas en Rayos X, siguen impactando igual de bien que el primer día.
En el tratamiento del sonido la cosa pinta mejor. Sniper Elite siempre se caracterizó de poseer una buena base de sonidos realistas para sus armas, de hecho me atrevería decir que es el que mejor lo hace en este campo. Con la remasterizacón, la calidad del sonido mejora, al igual que la de las voces con ese alemán tan poderoso saliendo de la boca de los nazis.
https://youtu.be/QGZWHjRjpwY?list=PLd8P6iXsJfl6_hm3zwngUr74BbXHktGm-
La banda sonora es correcta y cumple en su función de empaparnos en un ambiente belicoso. Su tonalidad recuerda muchísimo a la de los primeros Medal Of Honor y los recientes Valkyria Chronicles.
Multijugador potenciado hasta las trancas
Me parce curioso que el modo multijugador sea el que más cambios y mejoras tenga frente al original. Sniper Elite V2 es una obra que atrae principalmente por su campaña, teniendo una vertiente cooperativa bastante anecdótica aunque divertida. Para la remasterización se aumentan los modos para jugar online, se añaden sendas correcciones para las hordas, veremos nuevos personajes jugables extraídos de la saga Zombie Army y ha aumentado el número de jugadores por sesión. Hemos pasado de 8 a 16, pero por mucho que se aumente la capacidad los modos se sienten genéricos y aburren al par de partidas.
El único que me sigue pareciendo fresco y adictivo es Precaución, donde un jugador tendrá que cubrir con el francotirador a otro que irá inmiscuyéndose por los escenarios para marcar a los enemigos y completar diferentes objetivos. Por lo demás, vivimos en una época donde podemos encontrar cientos de juegos que ofrecen estas modalidades de manera gratuita en PC. No considero acertado el haber potenciado más la faceta multi que la mono jugador, aunque ya puestos, menos da una piedra.
El Solid Snake de la 2º Guerra Mundial debería jubilarse
La remasterización de Sniper Elite V2 es algo que nos ha pillado por sorpresa. Nadie la pedía ni tampoco nadie la quería. Hablamos de un título con un público muy exclusivo, con una propuesta interesantísima pero que considero que no ha sabido llevarla bien en la práctica.
La remasterización nos embellece el apartado técnico e insufla vida a sus modalidades cooperativas, amén de incluir todos los contenidos descargables en su interior. Sin embargo, no corrige los problemas de control, diseño y de IA que presentaba el original, haciendo que la experiencia se siga notando engorrosa la mayor parte del tiempo.