Hacedores de obras espléndidas como Bravely Default, los chicos de Acquire Corp. Conquistaron los corazones de los poseedores de Nintendo Switch el año pasado. Con una explanada artística que convergía los sprites de la época de Super Nintendo con entornos 3D, fuimos partícipes de las aventuras de 8 personajes en mini-tramas que nos maduraron como personas y jugadores. ¿Repetirá la jugada ahora en compatibles? Es posible, pero para ello sigamos leyendo el análisis de Octopath Traveler para PC que os desglosaré a continuación.
En Accquire están bien versados en la narrativa tradicional de los JRPG. Tal es así, que tras profundizar en la misma con Bravely Default decidieron experimentar con algo nuevo para el género: Multitramas independientes. Algunos me diréis que esto no es nuevo tampoco, es cierto que lo hemos visto con ciertas pinceladas en juegos como Final Fantasy VI, pero es la primera vez que se cimienta un juego al completo en esta forma de contar una cronología de sucesos.
¿Y qué tal funciona sobre el tablero? Realmente bien como historias independientes. Todas tienen un trasfondo mínimo para dar fuerza a sus protagonistas y a sus motivaciones para emprender sus respectivos viajes, pero sí es cierto que a la hora de entrelazarlas los nexos son muy artificiales e incoherentes. Por ejemplo, algunos se presentan como personajes con un sentido del individualismo muy marcado y al segundo ya te están pidiendo unirse a tus filas de héroes. La historia de otros incide directamente en el camino de la superación en soledad, sin embargo, el juego te permite unir fuerzas con otros protagonistas rompiendo con la coherencia de sus tramas.
Obvio que la unión de los viajeros es más una función mecánica que otra cosa, pero no habría costado nada haberse trabajado unas conversaciones obligatorias.
Podríamos decir cualquier cosa de Octopath Traveler pero seguro que la primera que se nos pasa por la cabeza es la belleza que emanan sus paisajes pixel-art acompasados de efectos en tres dimensiones. Es una delicia entrar en una ciudad afincada en el desierto y comprobar como la arena se mece con el viento, caminar por un puente y que este se altere a nuestro paso o la luz que emite la llama de nuestro candil bañe las numerosas mazmorras que recorreremos.
En la era de los 16 bits teníamos que imaginarnos estos efectos pero la tecnología y la imaginación de Accquire nos brindan el presente sumun visual. Porque esto no se relega solamente a los escenarios, en los combates fliparemos con los efectos especiales de los hechizos en total 3D, sin contar los renders animados de los enemigos, respetando el estilo de los jefes agigantados de los RPG de la vieja escuela, con el añadido de animaciones en tiempo real.
Todo esto era algo que podíamos ya vislumbrar en la versión de Nintendo Switch. Con esta versión para compatibles gozamos de un aumento de resolución, jugosos 60 frames por segundo, mejoras de antialiasing, postprocesamiento, tratamiento de las texturas, sombras y un aumento en el suavizado de los contornos. Todo acompañado de una optimización muy digna para ser disfrutado en cualquier PC que se precie, aunque no podemos obviar que el rendimiento puede ser exigente por la implantación de Denuvo, un hecho que siempre será una mala noticia.
Si gráfica y artísticamente Octopath es para quitarse el sombrero, cuanto más si hablamos de su banda sonora y doblaje. La primera nació bajo la batuta de Yasunori Nishiki, un joven compositor que hasta ahora solo había compuesto temas para los Beat Mania! De Konami y que ha debutado en el género RPG por la puerta más grande posible.
Es que no es para menos, el despliegue orquestal es titánico y con una soltura en la composición que nos deja de piedra. Porque además sus temas se apegan pefectamente dentro del espectro emotivo que evoca cada escenario, momento de la historia y batalla. Puede que si nos dedicamos a farmear los temas de batalla se nos acaben volviendo repetitivos, pero después es llegar a una ciudad y disfrutar de la melodía calmada que emiten y volvemos a subirnos a la nube de felicidad.
Claro está, de Switch a PC esto no cambia, pero una cosa es disfrutar de sus melodías en un altavoz de portátil y otra con unos cascos 7.1 envolventes. Ah, ahí la cosa es una flipada desmedida, culpables.
Tampoco me voy a quedar sin dar méritos a la interpretación global de los actores de doblaje. Todos han hecho un trabajo increíble, ajustándose a sus personajes e insuflándoles una vida más allá de la que una buena escritura puede. A título personal me quedo con las actuaciones de Patrick Seiz (Oberyn) y Cindy Robinson (H’aanit), pero como digo, todos hacen una labor sobresaliente dentro del campo anglosajón. Por desgracia, la japonesa denota un poco menos de apego por parte de sus actores y los seijuus son tan conocidos por mi parte que no me llegan a tocar tanto la fibra como la actuación de los previamente citados.
La pregunta va a broma, porque solo comparten un elemento: Los PT. En los Bravely podíamos aguantar los turnos para aumentar el poder de los personajes y así desplegar una fuerza descomunal en los enemigos. Aquí sucede algo parecido, solo que conformen pasan los turnos se nos irá llenando el medidor de PT, unas bolitas brillantes. Cada protagonista tiene su propio medidor y cuando queramos podemos descargarlo para aumentar su poder de combate, pudiendo provocar más daño a los enemigos, aumentando la capacidad de curación o incluso habilitando nuevas técnicas súper poderosas.
Por lo demás, se presenta como un RPG tradicional a la hora de combatir. Cada personaje desempeña un rol u oficio muy característico que puede mejorarse comprando nuevas habilidades con los PH ganados en las batallas. Sin embargo, lo interesante de esto es que podemos encontrar nuevos oficios escondidos en santuarios a lo largo del mundo. Una vez desbloqueados podremos equipar trabajos secundarios a los protagonistas, aumentando así su lista de habilidades tanto activas como pasivas.
Esto da una libertad genuina para que el jugador experimente con los diferentes oficios y cree su build para las batallas. No falta decir que esto permite crear formaciones ofensivas, defensivas, equilibradas entre ataque y curación, etc. Es cosa del jugador optar por las que considere más atractivas o efectivas, porque ojo, la dificultad del juego no se puede tomar a coña. En general, los enemigos de las historias generales no presentan demasiadas complicaciones, no así los de las misiones secundarias o los jefes secretos, los cuales nos harán estrujar la neurona buscando estrategias y saliendo de nuestra zona de confort.
Si hablamos del mapa tenemos que dar una de cal y otra de arena. Por un lado, la variedad de localizaciones es inmensa y muy enriquecida, nunca notarás que estás pisando suelo conocido, además que todo se conecta por caminos, grutas, playas y demás conformando un rico micro-universo coherente a la hora de echarse la mochila y patear. Por otro, al ser tan vasto se echa en falta alguna mecánica efectiva de viaje rápido. No es el caso. Solo podemos viajar entre ciudades grandes, haciendo que tengamos pegarnos unas buenas pateadas para ir a localizaciones intermedias (y cuanto más con el alto índice de combates aleatorios que nos acosan).
En cuanto a las misiones, las principales siempre las tendremos marcadas en el minimapa con una guía verde, y muy agradecida, puesto que perderse en este juego no es muy difícil viendo la libertad que nos brinda desde el primer minuto. Solo estaremos delimitados por el nivel de los enemigos de cada zona, sabiendo que aquí no nos quieren con un aviso de peligro cuando nos acercamos a una zona de más nivel del recomendado. Por desgracia, las misiones secundarias no presentan ningún tipo de guía y es un auténtico coñazo seguir las pistas para completarlas.
Además, la mayoría son encargos de recadero nada inspirados que se resuelven con las habilidades distintivas de cada personaje. Por ejemplo, cuando nos piden un objeto en concreto tendremos que robárselo o comprárselo a un determinado NPC, el problema es que no sabemos que NPC es a no ser que nos peguemos un buen atracón de horas probando hasta dar con él a suertes. Lo mismo con los NPC que tenemos que guiar o derrotar en un duelo.
Octopath Traveler tiene algunas decisiones cuestionables en cuanto a diseño jugable se refiere. No obstante, pasarlas por alto es muy sencillo y nos deja no una aventura si no ocho que son para el recuerdo. El juego desborda a nivel audiovisual y presenta un sistema de combate muy tradicional pero lo suficientemente modernizado para que sea una delicia para nuestros paladares.
A mínimo que te interese el género es una experiencia obligada. Para un servidor es de los mejores títulos del género que tenemos en la presenta generación y le enganchó casi 70 horas. Todavía no la he completado al cien por ciento, por lo que si buscáis contenido y de calidad a mayores tampoco saldréis defraudados.
Son Goku y Vegeta serán los protagonistas del próximo tráiler de DRAGON BALL: Sparking! ZERO.…
Devil Jin en Tekken 8 es el último personaje de la plantilla inicial en mostrar…
La nueva entrega de Yakuza se llama Like a Dragon: Infinite Wealth. Regresan las locuras…
Bandai Namco publica el tráiler de lanzamiento de Tekken 8, próximo videojuego de la mítica…
Llega el manga Dragon Ball Super 101 en el que tenemos más historia de los…
Disponibles los Wordle del 18 de enero de 2024. Pistas y solución del Wordle 742,…
Esta web usa cookies.