Análisis de Million Arthur Arcana Blood para PC

La disputa por el reino de Inglaterra estuvo sometida por muchos Arturos pero, ¿salió tan bien como nuestro análisis de Million Arthur Arcana Blood?

La licencia Million Arthur de Square Enix abarca multitud de productos. Muchos son videojuegos, siendo el primero uno de cartas para móviles, pero también podemos citar un MMORPG, un título para realidad virtual o un ARPG. Además ha dado lugar a una serie de televisión, manga y anime e, incluso, se ha cruzado con otros juegos como Megadimension Neptunia VII y SNK Heroines: Tag Team Frenzy. ¿Y qué tal se desarrolla su debut en el género de la lucha? Ahora os lo contamos con el análisis de Million Arthur Arcana Blood para PC.

La leyenda del rey Arturo, sí, pero extraña para los occidentales

Estos productos son conocidos en Asia, pero en Occidente la verdad es que no nos sonarán a la mayoría. Y quizás el más interesante sea el que nos llega ahora a PC, Million Arthur: Arcana Blood, que en Japón también cuenta con una versión para PlayStation 4 que, al menos por el momento, no se distribuirá en otras regiones.

La historia de Arcana Blood se ambienta en Bretaña, donde habitan muchos Arturos y cada uno quiere convertirse en el único rey. Por esta razón, «las guerras civiles son bastante habituales«, según Square Enix. El modo historia se centra en el Gran Torneo de Artes Marciales de Bretaña, donde estos guerreros lucharán por coronarse como el verdadero rey.

Este modo historia es el habitual modo arcade pero con escenas de diálogo, estilo visual novel, intercaladas entre combates –textos en inglés, voces en japonés-. Quienes deseen ahondar más en su narrativa también ofrece otro modo llamado Episodes of Arcana Blood, aunque el argumento de los personajes en sí no es que sea la panacea.

Quizás lo que más mole sea el abanico de luchadores invitados que vamos a encontrar. Si hemos mencionado antes la colaboración con SNK Heroines: Tag Team Frenzy, SNK participa aquí prestando a Iori Yagami de la serie The King of Fighters, y también podemos encontrar a Riesz de Trials of Mana o Koume Sakiyama de Lord of Vermilion, y entre las invocaciones seguro que a más de uno le suena Akira Ono de Hi Score Girl y más. Como pequeña pega, estos invitados no están disponibles para el modo historia. Iori por ejemplo no tiene modo arcade, aunque puedes entrenar en versus contra la CPU

Un título austero pero que se defiende con lo que tiene

Team Arcana es una desarrolladora especializada en juegos de lucha de poco presupuesto. Suyos son los Arcana Heart o Nitroplus Blasterz: Heroines Infinite Duel. Evidentemente aquí no vamos a encontrar unos valores de producción comparables a otros juegos como Mortal Kombat 11. Sin embargo, en lo jugable son títulos bastante entretenidos y Arcana Blood no decepciona en esto. Obviamente, hay que hacer de tripas corazón con sus limitaciones para que sea divertido.

En cuanto a los movimientos básicos poco hay que decir. Para tratarse de un juego 2D no es tan rápido como ciertos títulos de la competencia, y no suele abusar del combate aéreo, juggles ni los combos eternos. Además, la recuperación de vida alarga las contiendas más de lo que estamos acostumbrados. La salsa de Arcana Blood se encuentra en la personalización y otros aspectos un poco roleros que lo convierten más en un duelo estratégico que de reflejos. Claro está, predominan los combos sencillos y el abuso de técnicas animadas por encima de la complejidad y los combos infinitos.

La clave está en las características elementales y la edición de sets de personajes de apoyo. Podremos escoger hasta tres personajes convertidos en cartas que podremos invocar en batalla. Cada uno lleva un coste, así que las mejores invocaciones requieren un mayor gasto de energía y, a su vez, se dividen en tres categorías: ataque, saboteadores y de apoyo. Cada vez que invocamos recuperarán un porcentaje de nuestra barra de salud mientras que la información en pantalla detalla la fuerza del ataque, velocidad y rango de acción de estos movimientos.

Imbuye tu arma con los elementos

Pero hay más, en Arcana Blood también hay un sistema elemental de fuego, hielo o viento. Imbuir ataques con estas habilidades tiene sus ventajas: el fuego añade daño durante un tiempo, el hielo paraliza al enemigo y el viento nos recupera un poco de salud. Golpear repetidamente con el mismo elemento activa un bonus de daño, mientras que atacar con un elemento opuesto da como resultado un contraataque elemental interesante.

Prestando atención, la simpleza de Arcana Blood puede que desaparezca. Activar bonus elementales abre la puerta a ejecutar nuevos combos o cancelar habilidades que de otra manera no se podrían. Mientras, las invocaciones de coste 1 sólo afectan a ataques normales, las de coste 2 también afectan a habilidades así como las de coste 3 pueden cancelar las habilidades de otras cartas. Dependerá de nuestra paciencia por probar las mejores combinaciones y estrategias. La verdad es que da suficientes herramientas para que cada jugador profundice hasta donde quiera. Puede contemplarse como un versus simplón o como un fighting táctico de relativa profundidad.

El resto de modos cubren las necesidades habituales. Combate local, contrarreloj, entrenamiento, tutorial y galería. También existe el imprescindible modo online donde participar en combates clasificatorios, creación de salas y edición de nuestra ficha de luchador. Seguramente es donde más tiempo nos gustaría estar peleando, pero el problema es que la comunidad online es practicamente inexistente. A mínimo que seáis algo intensitos del online, este Million Arthur no os va cundir demasiado.

Un roster un tanto curioso

La plantilla de Million Arthur: Arcana Blood ofrece una de cal y otra de arena. Los personajes son variados en estilos, pero la estética anime es muy genérica y el número de luchadores (trece) sabe a poco. En cuanto descartemos algunos por estar mal equilibrados, ya ni os contamos.

Otro aspecto negativo son los sucesivos recortes por censura que le han metido. Primero en su salto de arcade a domésticas –ropa de algunas chicas modificada- y ahora en su salida en Occidente con la desaparición del movimiento cómico de Elle. Un movimiento bastante divertido que consistía en tocar el paquete de su rival. Huelga decir que al estar hablando de un juego de PC, la comunidad no ha tardado nada en crear un mod para recuperarlo.

Genérico en lo audiovisual, pobre en configuración gráfica

Artísticamente estamos ante un producto simplón, nada inspirado y que solo agradará a los más fans de los animes genéricos de la temporada. La verdad es que hacen que el juego luzca peor de lo que podría haber sido, más si pensamos en brutalidades artísticas como son los títulos de Arc System Works. A ver, los personajes están bien definidos y son grandes, pero como hemos comentado anteriormente la impresión es corriente y las animaciones son demasiado parcas como para que transmitan una fluidez digna de un juego de lucha.

Con los escenarios sucede lo mismo: paisajes poco inspirados, planos, sin demasiado movimiento y acompañados de una banda sonora con algunos guitarreos que se olvidan rápido. Y ojo, que está Yoko Shimomura detrás de la producción, pero es que ni se nota. Se trata de una producción menor y lamentablemente hasta lo apreciamos en la banda sonora.

En cuanto a las opciones gráficas, apenas tenemos nada para retocar quitando la resolución y el antialiasing. No pide mucho, es perfectamente jugable en PC de gama baja sin ningún problema, pero eso no quita que traiga bugs consigo como que se estropeen los portraits de algunos personajes durante el modo historia.

Un juego que intenta ir de atípico, pero acaba sabiendo a shonen rancio

En este análisis de Million Arthur: Arcana Blood exploramos sus ideas más que interesantes, pero que en el fondo no deja de ser otra producción animesca que pasará sin pena ni gloria. La verdad es que entretiene desde un principio, y si bien el potencial está en la personalización y en estudiar el uso de los elementos, cualquier novato sabrá disfrutarlo sólo con rascar la superficie.

Sin embargo, artísticamente, la banda sonora, el modo historia y sobre todo, el modo online, terminan por lapidarlo. Resulta difícil que pueda resultar mínimamente interesante para alguien ajeno al género.