Acompaña a Michael, Presidente de los Estados Unidos, y a su mecha Wolf en su cruzada a través de este análisis de Metal Wolf Chaos XD para PlayStation 4.
Los que ya me conocéis sabéis de buena fe que soy amante de los juegos que nos profesa la distribuidora Devolver Digital. Puede ser que algunas propuestas no salgan tan bien como me hubiese gustado, caso del reciente My Friend Pedro, pero es innegable que tarde o temprano acaban dando en el clavo de mis gustos tan afines a la Serie B. Así pues, os traigo el análisis de Metal Wolf Chaos XD para PlayStation 4, donde veremos si este remaster ha conseguido llenar mi indicador de «placer culpable«.
Los papás de Dark Souls tienen un excelente currículum haciendo mechas
Sí, culpables, estoy hablando de From Software. Ya podéis cerrar la boca del susto, porque sí, son los hacedores de esta aventura tan curiosa como extravagante. Corría entonces el año 2004 y la compañía nipona estrenaba, de forma exclusiva, Wolf Metal Chaos en la primera Xbox. Huelga decir que el título tuvo un lanzamiento único en Japón, lugar del cual no salió jamás dado el mal rendimiento económico que obtuvo.
En From ya tenían bastante bagaje haciendo juegos de acción donde pilotábamos mechas. Una de las sagas más conocidas de este género, Armored Core, es de ellos sin ir más lejos y el mismo Hidetaka Miyazaki estuvo implicado en el desarrollo de los títulos más famosos. Por ende, el resultado final de Metal Wolf Chaos pintaba «cojonuten«… Aunque la realidad fue algo distinta.
Xbox nunca tuvo buena fama (ni la tiene ahora) en Japón. Arriesgarse con un título tan gamberro y «yankee» suponía un riesgo enorme, por lo que no se destinó una financiación para echar cohetes a su desarrollo y promoción. El resultado fue un juego con un apartado técnico y jugable mediocre que no gustó absolutamente nada a los nipones. Sin embargo, el juego se importó de forma masiva a Estados Unidos, país donde sí gustó una barbaridad y alcanzó rápidamente el estatus de culto.
Devolver Digital rescatando los títulos más bizarros
Cómo no, la editora americana no podía quedarse de brazos cruzados y tuvo la brillante idea de traer a los sistemas actuales este titulito de mechas. La misma From Software estuvo a cargo de la remasterización pero con la inyección de capital absoluta de Devolver Digital.
Este Wolf Metal Chaos XD supone el salto a los 1080p y 4K, con una mejora de texturas simple y una limpieza de fuentes y menús suficiente para que no nos hagan lacrimar los ojos. Lamentablemente, se queda en eso y tenemos que sufrir unos molestos 30 frames por segundo -cosas de utilizar un motor obsoleto- en un juego de acción frenética al que le sentarían de vicio los 60 cuadros.
La mejora gráfica no consigue ocultar las carencias que ya presentaba en su día. Texturas simples y horrorosas, una paleta de colores apagada y demasiado fría, efectos y animaciones que atemorizan al más valiente y unos escenarios que son para de comer aparte. Los menús tampoco es que sean los más atractivos e intuitivos del universo, pero bueno.
Somos Wolf, un arsenal con patas de lo más mortífero
La premisa jugable es simple, directa pero no tan efectiva como me hubiese gustado. La aventura se divide en misiones recortadas a las que podemos acceder desde nuestra base y que podemos repetir tantas veces como queramos para farmear dinero, puntos o mejorar nuestros rangos.
Dentro de ellas, tendremos objetivos que versan en matarlo todo, derrotar jefazos y rescatar rehenes. Al principio, esta consecución de objetivos es interesante, pero con el tiempo acaba volviéndose repetitiva hasta la saciedad. Aun así, el desarrollo es maravilloso. Los sucesos van cogiendo una escala inmensa conforme avanzamos en la aventura, hasta llegar a límites donde lo épico y lo absurdo se dan de la mano para que soltemos el mando y aplaudamos.
En cuanto al «gunplay» optaremos por un sistema de apuntado semi-automático que nos permite disparar dos armas a la vez para crear un caos desorbitado. No obstante, el mecha es algo tosco de controlar y nos va frustrar en momentos que queramos realizar evasiones críticas o desplazarnos con el turbo.
Hablando ahora de nuestro inventario, este nos permite llevar una cantidad interesante de armas repartidas entre los dos compartimientos de la espalda del mecha. Podremos llevar en un inicio 8 armas (menos en función de si necesitamos ambas manos para empuñar algunos modelos), las cuales desbloqueamos encontrándolas escondidas por los escenarios y que podremos mejorar en el hangar. Para ello necesitamos dinero que obtendremos por cumplir objetivos y sacar buenos rangos en las misiones. Podemos invertirlo tanto en mejorar las armas que ya tenemos como en investigación, para descubrir modelos especiales o versiones avanzadas de las armas de nuestro inventario.
Preparados para impartir justicia en todos los estados de América
En cuanto a la trama, estamos ante el apartado más curioso y atractivo de los que atesora este videojuego. Vale, no hablo de que esté escrito como un best seller, más bien todo lo contrario, sino que su nivel de absurdez y parodia es tan legendario que es imposible no quererlo tal y como From Software lo ha concebido.
Sin más preámbulos, somos Michael Wilson, el presidente de los Estados Unidos en los tiempos que corren. Nuestro país está pasando por una mala racha económica, razón de la que se vale la oposición para sacarnos los trapos sucios a relucir y se acaba liando parda a niveles catastróficos. Nuestra mano derecha en el gobierno, Richard Hawk, nos traiciona y da un golpe de estado, poniendo al ejército en nuestra contra y obligándonos a abandonar la Casa Blanca. Con lo que no contaba es con que lo hiciésemos a lomos de un mecha armado hasta las trancas y listo para castigar a los traidores a la patria.
Así pues, tendremos que ir recorriendo los diferentes estados del país, erradicando al ejército rebelde y rescatando a las pobres gentes que siguen creyendo en nuestra capacidad «política». Cabe decir que el ejército no solo está conformado por soldados y tanques comunes, como se nos muestra en los primeros niveles, sino que la cosa se va yendo de las manos hasta tener luchas entre mechas colosales y tanques que parecen sacados de fábulas de Warhammer 40.000.
Las pistas de música se salvan un rato pero el doblaje es horrendo. Al menos, nos echaremos unas buenas risas con las interpretaciones tan sobre-exageradas y cutres, dignas del cine de Serie Z más casero.
Richaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaard!!!!!
Resumo el análisis de Wolf Meal Cahos XD como un regalito para los amantes de la parodia política mezclada con la exaltación de los mechas como solo los japoneses saben hacer. Un juego que patina o da lo justito en todos los apartados, pero cuyo desarrollo y matiz gamberro lo hace gozoso a niveles épicos.
Me da pena que en lo jugable no esté más perfilado aprovechando este relanzamiento, porque su control tan tosco y una dificultad desajustada en algunos tramos puede echar por tierra la experiencia a más de uno.