Análisis de Metal Gear Survive para PlayStation 4: Este muerto está muy muerto.

¿Cómo se habrá portado el spin-off de la serie de Konami sin su creador? Os contamos todo en este difícil análisis de Metal Gear Survive.

Un análisis, en muchas ocasiones, suele ser una muestra de sinceridad por parte de la persona encargada. Es por ello por lo que, siendo sincero, analizar Metal Gear Survive ha sido una experiencia realmente difícil. Las horas de juego que le he dedicado han hecho que tenga sentimientos encontrados y espero poder ponerlos en claro en nuestro análisis de Metal Gear Survive para PlayStation 4.

Tras la evacuación de Big Boss y Kaz Miller de Mother Base, los miembros supervivientes de la MSF abandonandos en los restos de su anterior base recuperan todos sus muertos para poder enterrarlos en el mar. Sin embargo, un miembro de las Naciones Unidas reclama el cuerpo de uno de los soldados aparentemente muerto en batalla. Este soldado en cuestión ayudó en la defensa de Mother Base antes de que un enorme agujero de gusano se abra absorbiéndole y llevándolo a una dimensión alternativa.

La verdad es que, leyendo el argumento así por encima, cualquier diría que esto ha salido de la cabeza de Kojima. Pero desde el principio, todo da una terrible sensación de estar metido a calzador y fuera de lugar. No es que Metal Gear Solid sea una saga ajena a las rarezas pero Survive se pasa de largo. Además… ¿zombis? Lejos de ser una novedad, se ha convertido en algo totalmente genérico que ya no impresiona a nadie.

La originalidad tiene el mejor sigilo

Por desgracia para el juego, hay una idea detrás de todo que es buena. De verdad. Mezclar el sigilo de Metal Gear es buena idea, pero no que los errantes puedan acabar con nosotros en tres golpes. El mayor problema es como Konami ha cogido esta idea y la ha destrozado de tantas formas que dista mucho de hacerlo un juego que merezca el aprobado.

Las primeras horas de juego son un eterno tutorial que nos obliga de ir a un sitio a otro y nos explica las muchas mecánicas de juego que Survive tiene. Y si habéis jugado a cualquier juego de supervivencia os las sabréis de memoria. Come para mantenerte fuerte, bebe para mantenerte sano…

Por suerte, la mecánica introducida en Metal Gear Solid 3 en la que tenemos que tratar distintas zonas del cuerpo según hayamos enfermado o nos hayan atacado le dan un punto de profundidad que otros no tienen. Por lo que si un enemigo nos ataca es posible que tengamos que tratar una laceración. Si bebemos agua sucia como recurso de emergencia, tenemos la posibilidad de enfermar.

Una buena idea sepultada en una montaña de malas ideas

Esto añade una pátina que adorna la mediocridad y la falta de inspiración general del juego. Por si fuera poco, todo el juego parece ser hecho a parches. Las misiones parecen totalmente inconexas y un “ve a este sitio y coge esto”. Poco a poco iremos descubriendo nuevas zonas que no varían mucho entre sí y el “argumento” irá desarrollándose de una forma increíblemente vaga hasta llegar a una conclusión vergonzosa.

Pero, sin duda, uno de los mayores puntos a favor del juego es el modo cooperativo. A pesar de que parte de la comunidad (o al menos algunos con los que he podido coincidir) era bastante… egoísta, normalmente todo el equipo debe estar unido para defender un punto concreto a la vez que conseguimos mantener a la amenaza zombi a raya. Estos zombis, llamados errantes, no aparecen en muchas variedades y derrotarlos aporta tan poco que no vale la pena ni acabar con ellos.

La parte buena es que, recogiendo Energía Kuban de los enemigos o de las misiones que hagamos (o del cooperativo que es la mejor forma de conseguirlo) nos permitirá mejorar a nuestro personaje y es genial ver como realmente se nota la mejoría.

La avaricia y la pereza: Dos pecados capitales

Gráficamente, el juego muestra la pereza con la que Konami se ha acercado a este Survive. Todo el juego está sacado totalmente de Metal Gear Solid V y con una peor resolución. El juego sufre caídas de frames puntuales y en muchas ocasiones objetos como la hierba o árboles aparecen o desaparecen de repente. Los personajes, tanto protagonistas como enemigos son totalmente inspirados y parecen ser sacados de una carpeta llamada “personajes genéricos”. Ni siquiera los zombis han sacado un esfuerzo mental para intentar crear algún enemigo original.

En el campo sonoro, la música y las voces siguen al nivel acostumbrado a la saga, pero no podemos centrarnos en ella cuando el resto del juego es totalmente hostil hacia el jugador.

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Y, como no, no podemos evitar hablar de la mayor polémica del juego: las microtransacciones. Para empezar, para poder disfrutar de un segundo personaje tendremos que pagar 10€ para tener las suficientes monedas para poder comprarlo. Es cierto que el juego no es realmente abusivo con este sistema. Sin embargo, deja entrever continuamente su avaricia en cuanto al dinero.

CONCLUSIONES DEL ANÁLISIS DE METAL GEAR SURVIVE

Metal Gear Survive tiene una gran idea que está sepultada por una vagueza enorme a la hora de crear el juego y por una continua sensación de estar metido a calzador. Reciclar su juego anterior con mayores problemas gráficos, un abuso de microtransacciones no pueden ocultar la avaricia detrás de Konami tras la despedida de Kojima.

Quizá si hubiesen decidido abandonar la marca Metal Gear y las transacciones nos hubiésemos podido encontrar con un interesante juego de supervivencia. Lástima que se haya quedado en un simple abuso para el jugador y para el fan de la saga.