La nueva sensación indie pone a prueba nuestra habilidad como líder y nuestra moralidad a prueba. ¿Seremos capaces de sobrevivir al invierno eterno? Descúbrelo en nuestro análisis de Frostpunk.
Los juegos desarrollados por estudios independientes son expertos en ponernos en situaciones extremas que otros han intentado, pero no han conseguir a alcanzar esas cuotas. 11 bit Studios lo ha conseguido con cierta facilidad y, no solo eso, se ha sacado uno de los mejores títulos de 2018. Su invierno eterno nos pone a prueba como jugadores y personas y la supervivencia se hace dura pero satisfactoria. Adéntrate con nosotros en el frío con nuestro análisis de Frostpunk para PC.
Un helado apocalipsis
Año 1886. Sin conocer los motivos, las temperaturas han bajado a un nivel insostenible para la humanidad y el invierno es constante durante todo el año. Los pocos supervivientes siguen tus designios como líder de la ciudad y la supervivencia es posible gracias a un enorme generador de calor desde el que debes de construir hogares y servicios básicos para la convivencia. Sin embargo, constantes decisiones morales nos pondrán a prueba. La muerte está tras cada minuto…
Frostpunk es un juego de simulación en el que tenemos que construir una ciudad y controlar todas las necesidades de los supervivientes alrededor de un inmenso generador de calor. Para ello, tendremos una serie de trabajadores que tendrán que recoger importantes recursos para poder hacer las construcciones necesarias y poder evolucionar en nuestra tecnología para hacer la supervivencia más “fácil”. Además, los cambios bruscos de temperatura en algunos días pueden hacer la jornada todavía más difícil.
La moralidad a juego
Precisamente, esa es la palabra que más tenemos que tener en mente y es que el título de 11 bit studios no es fácil. Continuamente, los supervivientes nos harán peticiones como mantener el calor por encima de una media o alimentos, entre muchas otras. Cumplirlas será fundamental si queremos tener el nivel de descontento bajo y el de esperanza alto. Tan importante es esto que, si no lo conseguimos, no sólo empezarán a morir, si no que podrían alzarse contra nosotros o probar suerte en el exterior. Para aumentar el calor, podemos forzar el generador a riesgo de que estalle y acabe con la ciudad. Una vez más, las decisiones son parte del jugador.
Este debate moral trasciende más allá del juego y nos afecta directamente como personas cuando nos ponemos en situaciones tan importantes como obligar a que los niños trabajen o forzar a que los enfermos sigan vivos realizando amputaciones o aplicándoles extensiones artificiales. Esto hará que nuestro trabajo sea más sencillo al tener un mayor número de trabajadores que explotar, pero el descontento aumentará a pasos agigantados. Para evitarlo, tendremos que ser cuidadosos con las decisiones que tomemos y actuar en consecuencia.
A medida que vayamos avanzando en cada uno de los tres escenarios que tiene el juego por el momento, tendremos que aventurarnos al exterior, mandando expediciones a explorar el terreno que hay a nuestro alrededor. En algunas ocasiones encontraremos supervivientes a la deriva, en otras recursos e incluso máquinas que pueden ayudarnos en algunas tareas. Pero cuidado, ya que estas expediciones pueden acabar heridas o incluso muertas, perdiendo un significante número de trabajadores. A fin de cuentas, nos damos cuenta de que las personas que tenemos bajo nuestro control son recursos para poder sobrevivir.
Condiciones gráficas bajo cero
Gráficamente, Frostpunk no es un juego espectacular pero, debido a su temática, requiere de un ordenador más o menos potente. Los efectos de nieve que vemos desde el título de juego puede hacer que algunos ordenadores más antiguos se resientan. Curiosamente, al hacer zoom (como ocurre en otros juegos como Civilization o Endless Legend) podemos ver que la ciudad de por sí está realmente detallada y podemos ver como cada uno de los trabajadores se dirige a su lugar e incluso vemos con detalles aquellos que pueden haber sido amputados. Realmente, 11 bit studios ha cuidado con mucho detalle el juego.
En el campo sonoro, sin embargo, no tenemos una portentosa banda sonora, más bien tenemos casi un hilo musical fúnebre mientras escuchamos el terrible sonido del fuerte viento cada día. En algunas ocasiones tendremos texto leído pero poco más, aunque no necesita nada de eso. Frostpunk es un juego visual cuyo mensaje llega a nosotros a través de su jugabilidad.
CONCLUSIONES DEL ANÁLISIS DE FROSTPUNK
Frostpunk es un juego brutal en todos los aspectos. Por un lado, nos muestra una fachada de simulador de supervivencia que tiene todo lo que puedes necesitar. Es difícil pero increíblemente satisfactorio. Por otro lado, tras rascar y penetrar el exterior, nos encontramos con un juego que pone a prueba nuestra moralidad como personas y ver si somos capaces de llevar a cabo el famoso dicho “