Análisis de Burger Time Party para Nintendo Switch

El clásico de pisar ingredientes de hamburguesas se pone al día en cuanto a gráficos. Sin embargo no es capaz de mejorar ningún otro aspecto.

Bienvenidos al análisis de Burger Time Party para Nintendo Switch. Si eres viejo, muy muy viejo como algunos de los redactores de esta casa, seguro que conoces este suculento arcade. Nos remontamos a sus orígenes del año 1982 y hoy analizamos esta nueva versión para Nintendo Switch donde se ha actualizado su apartado gráfico, dejando de lado otros aspectos como jugabilidad y sobre todo la diversión.

Lo que vengo a decir, es que Burger Time Party viene a ser básicamente una puesta al día del original – así como sus otras versiones que hemos visto estos años – en cuanto a lo que vemos en pantalla, pero sigue siendo el mismo juego simplote de siempre. Esto quiere decir que sus mecánicas y jugabilidad las he encontrado tremendamente desfasadas a los tiempos que corren y rápidamente he sentido que todo el rato estaba haciendo lo mismo como si de un juego arcade de hace 37 años se tratase.

Va de pisar ingredientes

Burger Time Party es más simple que la tabla del 1. Manejamos a un alegre chef de hamburguesas que debe pisar los ingredientes para que estos caigan en cadena hasta formar el plato final. Para ello nos movemos por plataformas planas desplazandonos por escaleras a lo Donkey Kong. Desgraciadamente no todo es tan fácil para nuestro amigo, puesto que algunos ingredientes muy enfadados con nosotros -no me queda claro por qué- se pasean por el escenario provocándonos la muerte si nos tocan.

Nuestro protagonista puede aturdir a los enemigos echándoles pimienta un limitado número de veces, además de contar con algún power up que nos puede proporcionar invencibilidad temporal. No obstante, la mejor estrategia viene a ser calcular cuándo van a caer los ingredientes que pisamos para que se precipiten contra ellos y así lograr una mejor puntuación en la fase.

Modos de juego en solitario y cooperativo

En Burger Time Party podemos “disfrutar” de esta experiencia con y sin amigos. El modo multijugador local se desbloquea tras superar en solitario las primeras fases del juego y es el mejor aliciente para “divertirse” con este cartucho. El caos en pantalla puede ser brutal con más de un jugador.

El nivel de dificultad de Burger Time Party es incremental y puede que algún nivel se nos atragante un poco, pero no es nada que no podamos superar. Además cuenta con el bonito añadido de un ranking de jugadores mundial para picarnos a ser el mejor chef de hamburguesas que existe.

Más de lo mismo con unos gráficos bonitos

Burger Time Party ha renovado su apartado gráfico con unos sprites al estilo Cuphead. La verdad es que quedan estupendamente y lucen muy bien para este tipo de juego. No obstante, algunos niveles grandes pueden verse un tanto minúsculos en el modo portátil. El sonido tampoco es que sea una maravilla pero cumple con lo que hay.

Es en el apartado jugable donde más contras he visto en Burger Time Party. Se hace muy repetitivo en poco tiempo y te da la sensación de estar ante un juego muy viejo al que han aplicado un filtro HD. Se podía haber innovado más en sus mecánicas, pero bueno, quizás sea idóneo para partidas cortas y tranquilas en el baño.

Conclusiones del análisis de Burger Time Party para Nintendo Switch

Burger Time Party es una nueva versión del arcade clásico que ha renovado su apartado visual y ha dejado intacta su jugabilidad. Es un juego entretenido para partidas cortas, sobretodo si te gusta el original, pero cansa y se hace repetitivo en cualquier otro aspecto. Su modo multijugador local siempre es divertido si tienes colegas en casa. Más allá de eso, no es un juego que te recomiende.