¿Cómo conventirnos en la mejor piloto? Con paciencia y perseverancia. Los dos pilares fundamentales que veremos en nuestro análisis de AIRHEART — Tales of Broken Wings.
Si hablamos de juegos de aviones es probable que lo primero que se os venga a la cabeza sea Ace Combat. O Afterburner… O cualquier simulador de vuelo. Pero es probable que ninguno sea tan bonito como el título de Blindflug Studios. Si bien no se convertirá en un título imprescindible, si es un viaje digno de disfrutar. Descubre el por qué en nuestro análisis de AIRHEART — Tales of Broken Wings.
Granaria: Una ciudad única que se erige entre las nubes y que da lugar a uno de los puertos en los que la pesca aérea es más valorada. Sin embargo, la aparición de piratas lo está convirtiendo en un método de vida increíblemente arriesgado. Amelia, lejos de tener miedo, esta joven pescadora desea alcanzar los vastos confines del mundo y descubrir el secreto tras la legendaria ballena voladora. ¿Seremos capaces de llegar a buen puerto?
Un twin-stick diferente
Desde el principio, AIRHEART no tiene pensado en ofrecernos una historia que sacudirá nuestras mentes, si no que es más una simple excusa para ponernos en un contexto. Y la verdad es que AIRHEART consigue crear una atmósfera tranquila gracias, en parte a su trasfondo y a su aspecto visual del que hablaremos más adelante.
Jugablemente, AIRHEART es un twin-stick shooter en el que moveremos con el joystick izquierdo nuestra nave y con el derecho dispararemos a los piratas que nos encontremos y a otros obstáculos. En principio, tendremos una nave bastante modesta pero, a medida que vayamos consiguiendo dinero a través de la pesca aérea, podremos adquirir nuevas partes para mejorar nuestro avioncito y, de esta forma, poder plantar cara a los aviones piratas enemigos más fuertes y poder surcar los diferentes niveles del mundo.
En cada uno de los niveles, separados por un canal de aire que nos impulsará al siguiente nive, encontraremos peces que tendremos que cazar pasando por ello. Algunos, correrán más que nosotros, con lo que tendremos que esperar a tener mayor velocidad para poder capturarlos. Tras cada viaje, en el que tendremos que aterrizar en nuestro puerto sin chocar con los obstáculos que habrán en el camino, los venderemos obteniendo dinero con el que mejorar nuestra navecita. El mayor problema es que todo lo que vemos en los primeros minutos del juego es lo que veremos horas después del juego. No tenemos mucha más variedad y el juego acaba siendo un ejercicio de perseverancia para conseguir alcanzar nuestra meta soñada.
Amor, amor a primera vista
Visualmente, AIRHEART es una maravilla. A pesar de la simpleza de sus escenarios, la tranquilidad que desprende y lo precioso de todo lo que nos encontramos, desde las pequeñas islas que adornan los escenarios, la variedad de toda la fauna “aérea” que encontraremos y lo diferentes que resultan todas las naves piratas que pretenderán evitar cumplir nuestro sueños, es lo que hace AIRHEART especial. Esta belleza también está impregnada en la banda sonora que, de nuevo, muestra la tranquilidad del mundo con sus suaves y tranquilas melodías.
CONCLUSIONES DEL ANÁLISIS DE AIRHEART — TALES OF BROKEN WINGS
AIRHEART — Tales of Broken Wings es uno de esos juegos de relleno de tu biblioteca de Steam al que le dedicadas un par de minutos o una hora para desintoxicar tu mente de títulos AAA que requieren de una mayor atención. Eso sí, desprende una rutina típica de los juegos F2P de móviles (repetir, conseguir dinero, repetir…) que acaba convirtiendo el juego en un, por desgracia, auténtico ejercicio de perseverancia que puede costar a muchos jugadores. Sin embargo, AIRHEART vale la pena darle un buen intento, al menos, para despejar la mente.