Joachim Kempin, ex-ejecutivo de Microsoft ha acusado a Steve Ballmer, director ejecutivo de la compañía, de eliminar a cualquiera que supusiese una amenaza para su puesto. Al menos, estos ex-directivos pueden migrar Xbox bajo el brazo.
Como ha dicho en una entrevista para Reuters, Ballmer consolida su posición forzando la salida de quienes retan su autoridad. Pone como ejemplo el caso de Richard Belluzzo, quién trabajó para la Xbox original.
Belluzzo no tenía espacio para respirar ahí arriba. Cuando trabajas directamente con Ballmer, y Ballmer piensa que ‘quizás este tío algún día me quite el puesto’, entonces aún tienes menos aire
Belluzzo abandonó Microsoft a los 14 meses de ser nombrado jefe de operaciones de la compañía. Hay más ejemplo, todos de la misma temática y final. Como resultado, desde que Ballmer llegó a su actual puesto, la compañía habría perdido oportunidades en sectores en expansión.
Perdieron todas las oportunidades de las que hablábamos cuando estaba en la compañía: tabletas, teléfonos. Teníamos una tableta lista, teníamos un sistema operativo para tabletas cuando salió Windows XP, pero nunca se desarrolló apropiadamente
Microsoft necesita alguien de 35-40 años, un joven que entienda a la generación Facebook y la comunidad de móviles. No a alguien en el escenario tan agresivo anunciando la próxima versión de Windows y pensando que puede tener éxito con eso
En mayo, Stever Ballmer fue nombrado el peor director ejecutivo de una gran marca en Norteamérica. En agosto, varios empleados hablaron para un artículo de Vanity Fair llamado La década perdida de Microsoft.