Ya tenemos por aquí rulando la nueva actualización 2.3.0 de Nintendo Switch, culpables. Pero si te esperabas grandes cambios, mejor baja tus expectativas.
El tema de ir añadiendo cosillas a los sistemas de las consolas actuales mola. De pronto te levantas un día y te encuentras con la actualización 2.3.0 de Nintendo Switch. Por poner un ejemplo. Sin embargo, hay veces en las que uno espera más de lo que se le da. Y es el caso.
La nueva consola de los chicos de Kimishima tiene ya por ahí pululando su nueva versión. La cosa es que los cambios que se introducen es ella son… más bien escasitos. Si no, comprobarlo vosotros mismos. La propia web de Nintendo América describe el parche como algo para «mejoras en la estabilidad general del sistema y una mejor experiencia de usuario». Y entonces es cuando miras la pantalla y te quedas con cara de póker.
Mira que hay promesas que nos han hecho los chicos de Nintendo con su nueva consola. Que si Netflix por un lado, que si explorador por otro, que si más opciones… Y por el momento no hemos recibido ninguna de ellas. Solo cambios menores en la consola y absolutamente ninguno «tocho».
Vale, de acuerdo, que solo han pasado un par de meses y medio desde que se lanzó al mercado. Pero ya podrían meter alguna cosilla. Que esta actualización 2.3.0 de Nintendo Switch les ha quedado más sosa que la actuación de España en Eurovisión 2017, leñes.
Pero bueno, dejando de lado el tema de exigencias a nuestro sistema híbrido de juegos, suponemos que de cara al E3 2017 sí que veremos algún que otro anuncio relacionado con algo más que juegos. Sobre todo con lo bien que les está yendo la cosa a los de Kyoto. Que Nintendo Switch sigue vendiendo como churros. Y de los buenos, además.