La actualización 2.00 Masamune para PS4 ha supuesto unas cuantas funcionalidades nuevas y al mismo tiempo un quebradero de cabeza para los usuarios. Y es que Masamune traía consigo un pequeño enorme fallo que dejaba a las PS4 tiesas y cojas. Bueno, eso ya venía de serie, pero es por darle dramatismo.
Masamune como actualización pintaba genial: posibilidad de continuar descargas, reproducir música desde un USB o las cambios en territorio boradcast vaticinaban una mejora sustancial en cuanto a las posibilidades de la consola, llegando a ponerla en igualdad de condiciones con Xbox One, su inmediato rival y perseguidor en ventas. Pero Masamune venía acompañado de un error fatal, que podía llegar a dejar muertas las PS4 que entraban en modo suspensión (simplemente apagando la consola).Otros jugadores perdían datos clave cuando volvían de la suspensión, tales como partidas guardadas inutilizables.
Por suerte este fallo no ha sido devastador y el número de usuarios afectados se puede considerar escaso, pero suficiente para mostrar un cabreo considerable. Tal ha sido así que Sony se ha puesto ha trabajas desde el minuto 1 para poder solucionar el lío en el que se ha metido. Tras la actualización 2.01 llega 2.02 con mejoras en la estabilidad del sistema, ya que la primera no llegó a arreglar del todo el desastre de la suspensión.
Pinchad aquí para acceder tanto a la actualización del sistema como de otra destinada a los discos duros externos. Desde Guiltybit deseamos que este asunto sea solucionado rápidamente, de modo que el único problema que tengan los usuarios de PS4 sea la cojera.