Mucho se está hablando sobre el firme propósito que tienen las máquinas next gen de exterminar o regular el consumo de videojuegos usados. Si bien a las desarrolladoras de juegos no les falta razón al esgrimir que la segunda mano -en cierto modo- les afecta negativamente, también deberían pensar que, el alto precio de los videojuegos que impera en el mundo de las videoconsolas, es un factor determinante a la hora de quedarte en tu casa y pasar la tarde mirando el techo en lugar de salir a comprar novedades.
Como el usuario no presiona en masa, la industria sigue a lo suyo, y está a punto de meternos un gol por toda la escuadra. Un gol que, por cierto, pone en guardia a otros magnates distintos, esto es, a los que venden juegos usados, que como podemos ver, ya están intentando apaciguar a sus compradores. Mirad si no como el CEO de Gamestop va a lo suyo e intenta convencernos de que su negocio no se hundirá en la miseria:
Sony y Microsoft han dicho que los juegos podrán ser revendidos, y eso es exactamente lo que ya anticipamos. Es un método para poder permitirnos los juegos, y las tres nuevas plataformas entienden esto.[…] A medida que la gente se pasó a PS3, vendieron sus viejas consolas y colecciones, que es el por qué de que Sony decidiera dejar de soportar la retrocompatibilidad en los modelos posteriores de su máquina. Esta es la razón por la cual el sistema «vende, compra, cambia» funciona bien. Permite que la gente compre nuevos juegos cambiando los viejos. Esperamos ver lo mismo en la transición a PS4 y Xbox One.
Querido amigo Tony Barnel, no conozco un universo en el que Sony quitara la retrocompatibilidad por eso que dices, no creo que todos hayamos ido en masa a vender nuestras PS2 y Xbox para comprar 360 y PS3 y desde luego no creo que lo hagamos en esta generación, más que nada, porque sois vosotros mismos los que habéis fomentado un absurdo afán por el coleccionismo exacerbado, que ha sido tendencia durante los últimos cuatro o cinco años. Vamos, que si una persona se ha gastado 3.000 Euros en ediciones coleccionista, no esperes que ahora vaya corriendo a la tienda para que le den un cheque-canjeable-en-la-misma-tienda de 400 Euros por ellas.
Por otra parte, no veo motivo alguno que me impulse a comprar un juego de segunda mano next-gen, si luego voy a tener que pagar un arancel que, según indican los rumores, vendrá a costar casi lo mismo que uno nuevo. Para eso me lo compro nuevo, que me da más gustito, cuando alguna tienda tenga a bien el rebajarlo.

Señor de GameStop, queridos culpables, asumamos que esto es el adiós al alquiler de fin de semana, a la inmensa mayoría de ventas de segunda mano next gen y a un modelo que ha dado grandes prestaciones a usuarios y compraventas. Es más, digamos adiós a llevar un juego a casa de un amigo, a los trapicheos en los foros, a que los chavales puedan intercambiar sus juegos en el cole, y a que las nuevas generaciones puedan emplear sus 5 ó 10 Euros de paga descubriendo pequeñas grandes maravillas enterradas en las cestas de juegos más apestosas. Culpables, bienvenidos a la next-gen.