Por fin hemos podido probar de primera mano el nuevo shooter de Electronic Arts desarrollado por el estudio Danger Close y vamos a intentar transmitiros con todo lujo de detalles lo que nos ha parecido.
La presentación daba comienzo y Greg Goodrich, productor ejecutivo de Medal of Honor: Warfighter, empezaba a darnos detalles sobre este nuevo título. Su discurso se centraba en la jugabilidad tan patriótica que podremos ver en el título pudiendo eligir 12 equipos de soldados Tier 1 internacionales de 10 países diferentes donde deberemos cooperar como patrullas de forma que si un compañero cae en combate podamos saber quién ha sido su ejecutor, y la posibilidad de jugar en mapas del mundo real de los cuales probamos el modo campaña en Filipinas en consola y su multijgador en PC en Sarajevo.
El contenido emocional también hará presencia en el título pues pudimos ver cinemáticas, de gran calidad, sobre nuestro soldado y los atentados que hubo en Madrid hace unos años (quizás podrían haberlo hecho con algún acontecimiento ficticio).
Una vez finalizada la presentación nos dirigimos a probar Medal Of Honor: Warfighter en su versión de consola, Xbox 360 para ser concretos. Comenzábamos con una impresionante cinemática de nuestro personaje en un hospital, y cuando os decimos impresionante es impresionante pues costaba saber si era en realidad una película o el motor Frostbite 2 haciendo de las suyas. Acto seguido pasábamos a la acción, nos encontramos en Filipinas donde nuestra misión es la de rescatar rehenes en la fortaleza Abu Sayyaf en Basilán.
Era noche cerrada y llovía, unos efectos de iluminación bien conseguidos pero creemos que se mostró este nivel en concreto debido a que sería más difícil ver los apuros que pasa Frostbite 2 en consolas a plena luz del día, como sucedió con Operación Guillotina de Battlefield 3.
Un helicóptero hacía aparición y varios compañeros se bajaban para continuar la misión con nosotros; a partir de aquí debíamos aniquilar enemigos hasta llegar a una zona segura desde la que poder ver el interior de la fortaleza, un corto camino de lo más lineal donde algunos enemigos se exponían más de lo necesario en ocasiones aunque otros en cambio nos lanzaban granadas de forma continúa.
Una vez llegados a la zona segura debíamos indicar al helicóptero la posición central del edificio para que atacara, hecho esto aparecíamos directamente subidos en él disparando desde el cielo a cualquier enemigo, coche, furgoneta o árbol que hubiera en la zona llenando la pantalla de explosiones, con alguna caída de frames eventual. Un espectáculo pirotécnico de gran nivel sabiendo que era la versión de Xbox 360.
Terminado el corto nivel podemos aseguraros de que la sensación era la de tener delante un juego prácticamente clavado a Battlefield 3, al menos en su campaña en consola. Un apartado gráfico a la altura, puesto que las consolas no dan para mucho más a estas alturas, sonido ensordecedor y una jugabilidad y movimientos calcados a los vistos en Battlefield 3. El uso de Frostbite 2 puede ser una ventaja en el apartado gráfico pero muchos usuarios tendrán una inevitable sensación de Déjà vu.
Llegaba el momento, era la hora del PC y el multijugador de Medal of Honor: Warfighter, ¿estaría a la altura? Lamentablemente el número de jugadores eran 8 formando 2 equipos de 4 jugadores en un pequeño mapa situado en Sarajevo donde las coberturas no eran más que simples tabiques de ladrillo.
Comparándolo con Xbox 360 parecía completamente otro juego, mayor nitidez, resolución a 1080p, una tasa de 60 frames constantes sin ninguna bajada, texturas bien definidas, iluminación lograda en un mapa nocturno y ausencia total de dientes de sierra…una delicia gráfica.
Empezamos seleccionando la nacionalidad de nuestro jugador al igual que su clase, teniendo 12 equipos de soldados distintos pero que más allá de su país de origen siguen siendo los típicos soldados de asalto, apoyo, francotirador…etc.
El modo de juego era el clásico «captura la bandera» en el que para ganar la partida un equipo debía hacerse con la bandera y llevarla a su zona de origen; fácil y sencillo en un mapa relativamente pequeño y con pocos jugadores.
La jugabilidad cambiaba respecto a lo visto en el modo de un jugador, el hud cambiaba notablemente teniendo un diseño distinto, a mi juicio mejor, las miras de las numerosas armas diferían bastante por lo que pensamos que el juego contará con bastantes desbloqueos en forma de accesorios de armas. Escopetas, rifles de asalto y de francotirador, ametralladoras ligeras, granadas cegadoras, distintos modelos de pistolas y muchas más que no pudimos llegar a ver, aunque lo que vimos nos gustó, estando aparentemente bien equilibradas y sintiendo por primera vez que eso no era un clon de Battlefield 3, sino Medal of Honor: Warfighter, un juego que si bien no innova mucho en su modo campaña, tiene personalidad propia y quedó patente en las pocas partidas que jugamos a su multijugador pese a que el modo de juego y los pocos jugadores simultáneos empobrecieran un poco la experiencia.
Medal of Honor: Warfighter se lanzará el 23 de octubre para Play Station 3, Xbox 360 y PC y aunque desgraciadamente no llegue a vender tanto como su competidor, Call of Duty: Black Ops 2, mejora notablemente a su entrega anterior de 2010 con un apartado gráfico más pulido, una campaña con mayor emotividad y un modo multijugador en el que deberemos cooperar con nuestros aliados internacionales para conseguir los objetivos propuestos.