El nuevo intento de juguetito de Microsoft, con permiso de Kinect, es el cacharro este al que ha llamado Hololens, ya tiene una primera puesta en escena, y pese a que nos ha pillado a todos con la bragueta bajada, tenemos nuestras dudas al respecto.
El aparatejo se ha mostrado con Minecraft, el único juego que por el momento se atreve con él, y la verdad es que pinta muy, pero que muy bien. Sobre una superficie cuadrada, nos han mostrado cómo se vería el juego desde las Hololens. En concreto, la vista de un jugador desde el modo creador del juego de los cubitos, mientras otro está jugando, por ejemplo, desde su tablet.
Espectacular la forma de moverlo y de interactuar con el medio, sin embargo hemos echado de menos el modo en primera persona o un gameplay de cómo sería jugar de forma… normal. Quizás eso esté reservado para Oculus de la que, por cierto, no han dicho nada nuevo, a parte de que llegará con mando de Xbox One y con la posibilidad de hacer streaming al sistema de realidad virtual.
Igualmente, y antes de picar como locos y tirar billetes sobre la pantalla del PC, vamos a centrarnos y a recuperar nuestra memoria sobre cuando Microsoft presentó Kinect. Todo era tan maravilloso y tan fantástico que todos queríamos uno. Y ahora míralo, que no sirve ni de espía en casa. Lo tomaremos con prudencia pero… oye, mientras mola.